noviembre 01, 2010

Sencillito, carismático… y emotivo

Aunque fueron pocos, Diego Torres se anotó una victoria entre los regiomontanos.

El argentino dijo que ya es hora de que las mujeres se pongan a
trabajar y los hombres las esperen en casa / Foto: Jorge López

Abelardo Luzanía / Monterrey, NL
Con su talento, carisma y humildad, el día de ayer Diego Torres recargó de esperanza a los regiomontanos.
Con un cierre pocas veces visto, el argentino concluyó su presentación en la Arena Monterrey, invitando a dos jóvenes discapacitados que únicamente reaccionan a su voz.
“Esta es la razón del por qué vale la pena seguir haciendo música”, dijo el intérprete ante la ovación de aquellos que fueron testigos de tan emotivo encuentro.
Entre lágrimas y el asombro de los jóvenes al verse junto a su ídolo, Diego Torres definitivamente se anotó una victoria más en Monterrey.
“Que la violencia no nos separe”, dijo el intérprete argentino al salir del escenario. “Que no paren los conciertos y que no se detenga la música”, agregó.
Con temas que lo llevaron a colocarse en el gusto de los mexicanos como “Tratar de estar mejor”, “Penélope” y “Sé que ya no volverás”, el intérprete ofreció un recorrido por su exitosa trayectoria.
Sentado junto a sus músicos y luego en el piano, Diego Torres tuvo un espacio para recordar a los suyos, y así con “Guapa” y “En un segundo”, las pantallas que adornaban el escenario proyectaron imágenes de sus padres: Lolita Torres y Julio César Caccia.
“Usted” fue el tema ideal para que el cantante se confesara “feminista” y alabara a las mujeres.
“Vengo de un país donde las mujeres son presidentas. Es hora de que las mujeres sean las que salgan a trabajar y nosotros las esperemos en casa”, señaló el cantante provocando la risa de los asistentes. “Soy el hombre ideal porque cocino, lavo, plancho... sobre todo plancho, me encanta planchar todo el día”, dijo en doble sentido. Diego también puso un poco de ambiente al bailar country con “Bendito”.
“Esto es consecuencia de todas las veces que he venido a México”, comentó antes de que en la pantalla central se mostrara un video del cantante rodeado de mujeres guapas, al más puro estilo de Gael García Bernal en Rudo y Cursi.
“Sueños” y “Color esperanza” fueron el primer intento por dar por terminada la cita con los regios, sin embargo, a las 22:26 Diego Antonio Caccia Torres (nombre completo del artista) regresó a la tarima para interpretar “Guapa” (por segunda ocasión), “Mi corazón se fue” y “Que no me pierda”.
Ya con las luces encendidas, Diego continuaba en el escenario despidiéndose de sus fieles seguidores que evidenciaron que aunque hoy es distinto, su esencia sigue siendo la misma.

http://www.milenio.com/node/567620

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