Luis Moreno / lamusica.com“Distinto” representa una nueva etapa en su carrera, tanto emocional como profesional, donde se dio la oportunidad de “permitirme ciertas aperturas” para llevar un mensaje que tuviera que ver con la vida misma que en ocasiones puede ser “dulce y agria” a la vez.
El proceso creativo del disco se dio en medio de una transformación que ocupó al artista. Primero se acercó aún más a sus familiares y más que nada a su padre, quien en el 2008 tuvo problemas de salud.
De hecho tan pronto como la semana pasada tuvo una recaída que obligó a Torres cancelar un espacio de su gira de promoción para atenderlo.
“Gracias a Dios somos cinco hermanos y tenemos una familia muy grande. Este tiempo con mi padre me ayudó mucho a establecer una relación con él en el sentido de que le serví de chofer, lo llevé de aquí para allá, al doctor, al club y hasta íbamos al gimnasio juntos. Necesitaba ese momento porque me parece que a los seres queridos hay que decirse las cosas a tiempo porque eso da paz y tranquilidad cuando ya no estén”, reveló en conferencia de prensa.
Ese tiempo alejado de los escenarios le sirvió además de inspiración. “Compuse alrededor de 30 canciones y solo quedaron diez para este disco. Me gustó contar con la ayuda de Rafa Arcaute en la producción porque me hizo ver otras cosas. A veces cuando uno está muy metido en lo que está haciendo necesita ese tipo de ayuda. Creo que por eso regresé distinto, porque marca un nuevo comienzo que si bien sigue mi esencia, que siento que no la he perdido, recoge nuevos brios enmarcados en ritmos más rockeros”.
Diego, cuyo sencillo en promoción “Guapa” ocupa los primeros lugares de preferencia en Estados Unidos y Latinoamérica, explicó que quiso retratar los aspectos más importantes de la vida en el proyecto discográfico. Tanto así que hasta habla de Dios en una de las canciones (“Esto es lo que soy”) donde “me pregunto una y otra vez si existe (Dios) y si tiene las respuestas que necesito para las preguntas que no se hacen. De hecho tengo uno de las frases donde digo ‘de qué lado está Dios’ porque lógicamente tengo una profunda fe pero a veces la vida duele y aprieta, como digo yo, y en esos momentos difíciles uno tiene que recurrir a esa profunda fe”.
Dijo además que “de eso se tratan todas mis canciones en general… de lo que pasamos a diario en nuestras vidas. Reflejan esos momentos de nostalgia, esperanza y tristeza porque la vida no es una felicidad constante ni una tristeza eterna. Siempre comparo esto con las olas, porque me gusta el surfing, y la vida está llena de olas que no puedes manejar y otras que te llevan a la orilla sin problemas”.
El intérprete de “Color y esperanza” defiende esta canción en específico con el tema “Cuando no queda nada” junto a Yotuel de Orishas, donde habla de “la frustración de nosotros los latinoamericanos con nuestros gobiernos. Agradezco a todas las organizaciones del cáncer y de otras enfermedades que han utilizado ‘Color y esperanza’ para promover ese sentir, pero no igual con la política. Claro que se les hace muy fácil vender esperanza y luego no los meten como decimos nosotros”.
Otros colaboradores en “Distinto” son “La Mala” Rodríguez en “Mirar atrás” y Kevin Johansen en “Bendito”. Entre los que compartieron los créditos del tintero con el cantautor figuran Noel Schjaris, Gianmarco y Rafael Arcaute.
http://www.lamusica.com/DIEGO_TORRES_TRAE_SUS_REALIDAD.html
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